Debilidades literarias: parte 1
¡Hola, viajeros y viajeras!
Hoy dejo a un lado las reseñas y demás cositas asiduas del
blog para traer una entrada un tanto especial. ¿Os ha pasado que tenéis como
favorito uno o varios temas en concreto que por mucho que aparezcan en los
libros una y otra vez jamás os cansáis? A mí me pasa mucho, más de lo que me
gustaría admitir.
Se trata de esos clichés que, en su mayoría, aparecen en las
novelas románticas. Me centro en estas porque ya sabéis que soy una romanticona
y el 90% de lo que leo, es romántica en todas sus vertientes. Así que la
entrada de hoy va de eso: debilidades literarias.
Aquí va una pequeña lista de 5 debilidades:
1. Una de mis mayores debilidades en cuanto a la romántica
se refiere es cuando los protagonistas se odian desde un comienzo, pero a pesar
de tirarse sillas, mesas y todo objeto a la cabeza, no pueden dejar de
desearse. Es entonces cuando comienza ese deseo irrefrenable de amor-odio que
me fascina.
Un claro ejemplo de esta trama ocurre en el libro “Fuimos
canciones" de Elísabet Benavent. Maca y Leo se odian tanto como se aman. Se insultan, se hacen
putadas… Pero arden el uno por el otro.
2. Otra debilidad, muy tópica por cierto, es cuando los protagonistas son mejores amigos. O bien es el mejor amigo del hermano mayor. ¡Dios, sí! Me encanta porque se vuelven protectores, cavernícolas (en su justa medida, tampoco nos pasemos) y tratan de esconderse aunque por dentro les pica más que un mosquito. Eso del amor prohibido me encantiza. ¿Y cuando descubren sus sentimientos? ¡Lo mejor! 😍
Un ejemplo de mejores amigos que se aman en silencio es el libro "Perfect", de Alyson G. Bailey. Es puro amor porque vemos cómo los protagonistas van creciendo y se van enamorando, además de equivocando. Es precioso, os lo recomiendo encarecidamente.
3. Y seguimos para bingo... Otro aspecto que me encanta es cuando el protagonista masculino es tan sumamente chulo que enamora. Divertido, sexy... brutal. Personajes como estos nos regalan sonrisas y nos sacan más de un suspiro. Y es que, ¿a quién no le gusta reírse, además de enamorarse en una novela romántica?
Roth, el protagonista de la trilogía "Los Elementos Oscuros"de Jennifer L. Armentrout (El beso del infierno, La caricia del infierno y El suspiro del infierno) cumple con cada uno de estos requisitos. Entre él y Bambi, su tatuaje, me volvieron loca cuando leí la historia.
4. Dejando a un lado los chicos en las novelas románticas, me encantan esos amigos que tienen tanta chispa. Puede que algunos libros sean más intensos que otros, pero hay amigos y amigas de los protas que lo ponen todo patas arriba con su ingenio. De esos que no tienen pelos en la lengua y que no puedes evitar carcajearte.
En este caso, aunque sé de muchos personajes tronchantes, me quedo con Lara, la mejor amiga de Alice en "Si solo fuera un cuento de hadas", de Victoria Vílchez. ¡Ay, qué chica! Es divertida a más no poder.
5. Y la última debilidad de esta lista (porque en realidad hay muchas más) se la lleva la acción. ADORO cuando los autores/as añaden a la trama algo peligroso como por ejemplo la mafia, una banda peligrosa, un tipo que está loco y la tiene tomada con el chico protagonista... Lo que sea. ¿A quién no le gusta la adrenalina? Está claro que a mí sí. Y si después los protas se ayudan entre ellos para solucionarlo, mejor que mejor.
Un ejemplo de un libro así, que contenga romance, intriga, acción y peligro es mi adorada saga "Mírame y dispara", de Alessandra Neymar. Aunque es un tanto larga, debo decir que no tiene desperdicio. Mafia, amor, personajes que enamoran, otros que querréis matar... De todo un poquito.
¡Y hasta aquí por hoy! Estas son solo unas pocas debilidades literarias porque en realidad tengo muchas, muchas más. Y vosotros/as, ¿tenéis alguna? Contadme, me encantará conocerlas.
Muchas gracias por vuestra visita y comentarios.
Un besote,
Toñi
Me pasa igual que a ti tengo todas esas debilidades pero tambien tengo otra mas, cuando los protas son hermanastros me encanta ese tipo de historias tambien jeje
ResponderEliminarEsta claro cristalino que tenemos las mismas debilidades literarias. Ay, Roth, como me gusto ese personaje. Y los personajes que se tiran los trastos a la cabeza pero que acto seguido se enganchan a comerse a besos, eso es de lo mejor.
ResponderEliminarSaludos
No soy muy de romántica, así que de tu lista solo me quedo con el último punto, que por cierto, tengo pendiente seguir con el resto de esa saga.
ResponderEliminarUn saludo,
Laura.